
Si llegamos a la recta final de liga cerca de los 60 puntos, entramos en playoff. Si llegamos cerca de los 70, nos jugamos el ascenso directo.
Hacer cábalas a 4 partidos de final de liga con 53 puntos en el casillero no es plan. Es tierra de nadie rezando por el milagro. Recordemos que bajamos un año con 51, en segunda los 40 y largos - 50 y pocos suelen ser mirar de reojo al descenso.