Existe un poco de picaresca, pero muy naif. Cuando vas en autobuses interurbanos o excursiones semi planificadas, el conductor siempre para en medio de la nada, donde solo hay una bar que, curiosamente, regenta un primo suyo. Al menos te sirve para huir del gallopinto!!!!!
En Costa Rica todo el mundo es bastante afable. Al principio creen que eres otro guiri yankee pero cuando les dices que hablas español, ya hay como un guiño de complicidad: ni te ponen la alfombra roja ni te tiran al volcán, pero si que te cuentan cosas que al yankee ni de coña (de hecho les tratan un poco de tontos).
Y yo no he estado en Panamá, pero conocidos me han contado que, como dice Jorecho, todo está muy bien. El único problema lo tuvieron en el Parque Nacional de Darién, una selva muy profunda y fronteriza con Colombia que era refugio de FARCs, narcos, etc. Mis amigos se pasaron una tarde en el cuartelillo dando explicaciones, pero no les pasó nada salvo perder el bus de regreso al hotel
