Óscar Gilsanz

[djtercio]

Este sabe, desde Santander, que no sigue y le da igual después de eso. No consiguió meterle la última marcha al equipo para meterse en playoff. Tuvo destellos como el partido del Almeria y partidos horrorosos como el siguiente del Eldense. Muchos empates y poca sequencia. Le dió estabilidad pero poco poca pegada. Suerte en el futuro.

[Kanatlarovski]

Yo no quería que siguiese ya antes de este final de temporada, pero aún así creo que hay que ser justos con él y agradecerle el trabajo realizado y que nos logró salvar con bastante holgura, mejorando mucho el pésimo trabajo de Idiakez.

Para mí no está capacitado para ser el entrenador del Depor, pero eso no quita que me parezca un tío muy válido para tener dentro del club. Se proclamó campeón de España juvenil, que es algo muy meritorio, luego ascendió al Fabril y a la campaña siguiente lo mantuvo, y ahora cogió al primer equipo en caída libre y lo salvó con solvencia. Ha cumplido siempre y cómo hombre de club me parece un tío muy útil. Hay que ser justos y buscarle un hueco, y no echarle a patadas, porque creo que no lo merece. Además que, por perfil, es un entrenador que no va a hacer carrera por ahí fuera, porque me da la impresión que él no va a buscar aventuras "exóticas" ni le van a sobrar ofertas, y como mucho, puede aspirar a un 1ª RFEF gallego (tipo Lugo), y en el mejor de los casos, algún 2ª de la zona baja que pueda necesitar cambiar de entrenador a mitad de liga (tipo Cultural Leonesa, pero la verdad es que yo no lo veo).
Evidentemente al Fabril no puede volver, pero tal vez no sería mala idea darle algún puesto en la cantera (yo ya dije que lo prefería de director de cantera antes que al amigote de Soriano).

[trempis]

El principal defecto que le veo es ser un hombre de club, precisamente. Los entrenadores no pueden ser extensiones de la presidencia o del director deportivo. Deportivamente no lo ha hecho mal, el equipo, salvo hoy, ha competido bien con él. Ha hecho cosas razonables y siempre he creído que la continuidad en lo que más o menos funciona suele beneficiar más que perjudicar. No veo un drama que siga ni que se vaya. Si se va y deja el club, pues mi agradecimiento por haber salvado al equipo y echar una mano donde se le ha pedido.

[valeron4ever]

Su principal defecto es no cagarse e ir a tope en contra de los dos que odia el foro. Más allá de eso, con el equipo normal, estaba en números de playoff y el equipo ha sido muy muy serio, con buenos resultados en casa de equipos potentes. Creo que no lo renovarán, pero o viene alguien muy top, o a mi me parece un error.

[hikso]

El final de temporada ha sido lamentable y lo de hoy ridículo. De ninguna manera puede seguir Gilsanz el año que viene.

[Yukio]

No me cuesta entender a aquellos que no queréis que siga. Es cierto que el tramo final ha sido paupérrimo y también que hay motivos para sospechar que quizá no tenga capacidad para dotar al equipo de personalidad propia. Al fin y al cabo, por lo que podemos observar desde la distancia, es tan lícito agarrarse a que ha conseguido el objetivo como recelar de su capacidad para liderar un proyecto con el objetivo del ascenso. Yo sigo creyendo que este club sólo podrá crecer con una base de identificación importante y pienso que Gilsanz es adecuado para el trabajo en este momento, pero eso no significa que ignore que esto es fútbol de primer nivel y que la capacidad profesional es innegociable. Es normal que quienes opinen que no tiene la suficiente prefieran su salida.

Lo que sí me cuesta mucho entender, y de hecho no entiendo en absoluto, es la dureza de varios comentarios. Se puede estar en total desacuerdo con su hipotética continuidad —que no creo que vaya a producirse, en todo caso—, pero me parece de bastante mal gusto que en algunos casos no se tenga cierta mesura con un hombre que tiene una hoja de servicios más que notable en los cargos que ha ocupado en el club. Desde el campeonato nacional de juveniles hasta esta permanencia, que por más que pueda considerarse insuficiente, es un logro. Lo mínimo que se ha ganado Gilsanz es un respeto unánime como trabajador y ningún deportivista, creo yo, debería ser tan soberbio o visceral como para perder esto de vista. Debemos saber tratar a los nuestros con elegancia y consideración, sí, también cuando llegue el momento en que se considere que ya no nos sirven.

Desde la distancia a Coruña, uno nunca sabe si la realidad del deportivismo es o no la que se palpa en las redes sociales y foros de Internet. Por eso me alivió en cierto modo comprobar que ayer el estadio señaló más arriba. Porque lo más incomprensible de todo para mis cortas entendederas es que se exija la salida de Gilsanz con contundencia virulenta, a veces rozando o rebasando lo irrespetuoso, y esto no se acompañe de una actitud similar hacia los responsables de la gestión deportiva e institucional del club. Es pura coherencia, aunque sea sólo porque son aquellos los que eligieron a ese que se juzga incapaz, Óscar Gilsanz. En realidad, no hay que echar demasiadas cuentas para comprobar que también esos otros han cometido más errores que el técnico, errores que no son puntuales sino que tendrán consecuencias en el tiempo, por ejemplo por ir vinculados a contratos que supondrán un lastre del que desde hoy seremos cada vez más conscientes. Sin embargo, existe quien se esfuerza tanto por machacar al entrenador que alinea a Petxarromán, como por relativizar la actuación de quien le firmó por cuatro años, previo pago de traspaso. Escuchar al estadio ayer me ayuda a entender que, al menos, esto no es algo generalizado o demasiado extendido.

[Don]

No me cuesta entender a aquellos que no queréis que siga. Es cierto que el tramo final ha sido paupérrimo y también que hay motivos para sospechar que quizá no tenga capacidad para dotar al equipo de personalidad propia. Al fin y al cabo, por lo que podemos observar desde la distancia, es tan lícito agarrarse a que ha conseguido el objetivo como recelar de su capacidad para liderar un proyecto con el objetivo del ascenso. Yo sigo creyendo que este club sólo podrá crecer con una base de identificación importante y pienso que Gilsanz es adecuado para el trabajo en este momento, pero eso no significa que ignore que esto es fútbol de primer nivel y que la capacidad profesional es innegociable. Es normal que quienes opinen que no tiene la suficiente prefieran su salida.

Lo que sí me cuesta mucho entender, y de hecho no entiendo en absoluto, es la dureza de varios comentarios. Se puede estar en total desacuerdo con su hipotética continuidad —que no creo que vaya a producirse, en todo caso—, pero me parece de bastante mal gusto que en algunos casos no se tenga cierta mesura con un hombre que tiene una hoja de servicios más que notable en los cargos que ha ocupado en el club. Desde el campeonato nacional de juveniles hasta esta permanencia, que por más que pueda considerarse insuficiente, es un logro. Lo mínimo que se ha ganado Gilsanz es un respeto unánime como trabajador y ningún deportivista, creo yo, debería ser tan soberbio o visceral como para perder esto de vista. Debemos saber tratar a los nuestros con elegancia y consideración, sí, también cuando llegue el momento en que se considere que ya no nos sirven.

Desde la distancia a Coruña, uno nunca sabe si la realidad del deportivismo es o no la que se palpa en las redes sociales y foros de Internet. Por eso me alivió en cierto modo comprobar que ayer el estadio señaló más arriba. Porque lo más incomprensible de todo para mis cortas entendederas es que se exija la salida de Gilsanz con contundencia virulenta, a veces rozando o rebasando lo irrespetuoso, y esto no se acompañe de una actitud similar hacia los responsables de la gestión deportiva e institucional del club. Es pura coherencia, aunque sea sólo porque son aquellos los que eligieron a ese que se juzga incapaz, Óscar Gilsanz. En realidad, no hay que echar demasiadas cuentas para comprobar que también esos otros han cometido más errores que el técnico, errores que no son puntuales sino que tendrán consecuencias en el tiempo, por ejemplo por ir vinculados a contratos que supondrán un lastre del que desde hoy seremos cada vez más conscientes. Sin embargo, existe quien se esfuerza tanto por machacar al entrenador que alinea a Petxarromán, como por relativizar la actuación de quien le firmó por cuatro años, previo pago de traspaso. Escuchar al estadio ayer me ayuda a entender que, al menos, esto no es algo generalizado o demasiado extendido.

Nadie le da más responsabilidad en este desaguisado a Gilsanz que a Soriassi. Nadie. Otro tema es que a este hombre se le ha caído el equipo de mala manera. Que sí, que había bajas, pero qué menos que el equipo salga a competir en todos y cada uno de los partidos.

Así que gracias, que siga en el club, pero no en un puesto tan importante como el de entrenador.

[Mr Mojo Risin]

Haberse plegado a Soriano y Benassi hace que pierda todo el respeto que se le podía tener. Se tiene que ir del club con sus dos amos.

[Andretua]

Muchas gracias por todo, básicamente por salvar a un equipo a la deriva y camino de segunda b. Cometió el gran error de intentar contentar a quienes no le querían ni de quinta opción y ya habían decidido que hiciese lo que hiciese no iba a seguir.
Ojalá pudiese seguir ligado al club, pero no le van a faltar equipos en donde emprender una carrera en los banquillos. Que tenga mucha suerte porque se la merece.

[roped]

Debería continuar, pero iniciaremos un novo proxecto partindo de cero, unha vez máis, veremos quen traen, non me espero gran cousa.

Na miña opinión Gilsanz é demasiado caladiño, gustaríame que largara máis nas roldas de prensa, principalmente dos árbitros, pero tamén que se autoreinvindicara, o que non deixaría de ser un xeito de criticar os seus xefes, que na miña opinión merecen eses paus e moitos máis.

Non o vai facer aínda que o liquiden, esa falta de carácter é o que menos me gusta del.

[Yukio]

Spoiler:

No me cuesta entender a aquellos que no queréis que siga. Es cierto que el tramo final ha sido paupérrimo y también que hay motivos para sospechar que quizá no tenga capacidad para dotar al equipo de personalidad propia. Al fin y al cabo, por lo que podemos observar desde la distancia, es tan lícito agarrarse a que ha conseguido el objetivo como recelar de su capacidad para liderar un proyecto con el objetivo del ascenso. Yo sigo creyendo que este club sólo podrá crecer con una base de identificación importante y pienso que Gilsanz es adecuado para el trabajo en este momento, pero eso no significa que ignore que esto es fútbol de primer nivel y que la capacidad profesional es innegociable. Es normal que quienes opinen que no tiene la suficiente prefieran su salida.

Lo que sí me cuesta mucho entender, y de hecho no entiendo en absoluto, es la dureza de varios comentarios. Se puede estar en total desacuerdo con su hipotética continuidad —que no creo que vaya a producirse, en todo caso—, pero me parece de bastante mal gusto que en algunos casos no se tenga cierta mesura con un hombre que tiene una hoja de servicios más que notable en los cargos que ha ocupado en el club. Desde el campeonato nacional de juveniles hasta esta permanencia, que por más que pueda considerarse insuficiente, es un logro. Lo mínimo que se ha ganado Gilsanz es un respeto unánime como trabajador y ningún deportivista, creo yo, debería ser tan soberbio o visceral como para perder esto de vista. Debemos saber tratar a los nuestros con elegancia y consideración, sí, también cuando llegue el momento en que se considere que ya no nos sirven.

Desde la distancia a Coruña, uno nunca sabe si la realidad del deportivismo es o no la que se palpa en las redes sociales y foros de Internet. Por eso me alivió en cierto modo comprobar que ayer el estadio señaló más arriba. Porque lo más incomprensible de todo para mis cortas entendederas es que se exija la salida de Gilsanz con contundencia virulenta, a veces rozando o rebasando lo irrespetuoso, y esto no se acompañe de una actitud similar hacia los responsables de la gestión deportiva e institucional del club. Es pura coherencia, aunque sea sólo porque son aquellos los que eligieron a ese que se juzga incapaz, Óscar Gilsanz. En realidad, no hay que echar demasiadas cuentas para comprobar que también esos otros han cometido más errores que el técnico, errores que no son puntuales sino que tendrán consecuencias en el tiempo, por ejemplo por ir vinculados a contratos que supondrán un lastre del que desde hoy seremos cada vez más conscientes. Sin embargo, existe quien se esfuerza tanto por machacar al entrenador que alinea a Petxarromán, como por relativizar la actuación de quien le firmó por cuatro años, previo pago de traspaso. Escuchar al estadio ayer me ayuda a entender que, al menos, esto no es algo generalizado o demasiado extendido.

Nadie le da más responsabilidad en este desaguisado a Gilsanz que a Soriassi. Nadie. Otro tema es que a este hombre se le ha caído el equipo de mala manera. Que sí, que había bajas, pero qué menos que el equipo salga a competir en todos y cada uno de los partidos.

Así que gracias, que siga en el club, pero no en un puesto tan importante como el de entrenador.

Yo ignoro el reparto de responsabilidad que cada uno hace para sí mismo. De lo que hablo en mi post es de algo que he comprobado yo y puedes ver tú también, y quien quiera hacerlo, que son los mensajes publicados en este foro. Basta con ir a cada hilo y leer lo que cada usuario dice, sopesar el nivel de dureza de algunos comentarios en cada lugar. Mi mensaje ni siquiera es una defensa de Óscar Gilsanz, ya he expuesto mis argumentos otras veces y además no pretendo invalidar las razones de quien no lo considera capacitado, porque es una obviedad que tienen fundamento. Lo único que reivindico es una crítica justa, coherente y equilibrada y es bastante evidente que no en todos los casos se hace. También lo es que en otros muchos sí. Pero vaya, no me entra en la cabeza que se pueda poner a Gilsanz de inútil para arriba en este hilo y hacer piruetas para explicar los desfalcos y las torpezas de los mandamases en otros. Algo falla en esos raseros y me parece terrible que vaya en perjuicio de un señor con la trayectoria en el club de este entrenador, y no de quien está aquí para medrar a costa del Deportivo.

[EMAIRXEN]

De las peores temporadas que recuerdo en Riazor, muy al estilo de la del descenso a Segunda B, un absoluto despropósito en casa, solo ha sido bueno su rendimiento fuera de casa, pero además se ha desconectado completamente el equipo al alcanzar la salvación cuando se debería haber intentado pelear por el Play-Off hasta el último momento, y se han ido 2 meses antes de vacaciones...

En 30 partidos, 43 puntos, 11 Victorias, 10 Empates y 9 Derrotas, en casa, 5 victorias, 6 empates y 4 derrotas, y fuera, 6 victorias, 4 empates y 5 derrotas.

Por lo hecho en Riazor, creo que no seguiría apostando por él como entrenador.

Saludos.

[Blues_13]

Pues yo estoy contento, pero una vez que se cierra la permanencia estaba claro que no había más que rascar, los POs demasiado lejos, los titulares demasiado exprimidos y los suplentes un pasito o dos por debajo, a partir de ahí le caerían palos tanto por jugar con los habituales e intentar "competir" como por poner a los menos habituales y "dejarse ir". Yo creo que ha hecho lo que más nos convenía, descanso a los más habituales, oportunidades para los no tan habituales en el contexto de segunda.
La salida de Lucas le simplificó la cosa pero aún así creo que ha estado a la altura de la plantilla y que conocía bien lo que había en el Fabril independientemente de que les diese más o menos bola mientras hubo cosas en juego.
El final de temporada y la crítica generada facilitará al club el darle boleto, pero no veo nada trivial traer a uno que lo mejore.

[BossYandel]

Lo que he dicho desde le principio, un funcionario. No se nota demasiado si está o si no está.

Si queremos un proyecto mínimamente ambicioso, no puede continuar.

[ecp_mjb]

Yo no lo echaré de menos, al menos hasta que vea que su sustituto es peor.
En ningún momento me pareció que haya aportado nada al equipo, más allá de "aprovecharse" de las cualidades de Yeremai y Mella, y de la gran mejoría de Helton respecto al inicio de temporada. Al igual que la temporada pasada las individualidades han conseguido salvar la temporada, porque como equipo mi sensación es que casi los podía haber "entrenado" yo con igual resultado.

Y el remate de temporada ha sido vergonzoso. Es normal bajar el ritmo una vez salvados. Pese a que en Gijón aún teníamos opciones matemáticas de aspirar al play-off, creo que Gilsanz y los jugadores eran tan conscientes como la mayoría de aficionados "y entorno", de que la realidad es que tanto entrenador como plantilla estaban muy lejos de estar capacitados para esa aspiración, por lo que lo único que nos quedaba era hacer un fin de temporada "digno". Y NO LO FUE, porque una cosa es perder los 4 partidos, como se perdieron, y otra es hacer el ridículo. Ayer ni rematamos a portería. En Zaragoza y Gijón casi igual. Y contra el Granada poco mejor, aunque con la disculpa del penalty a Villares, que nadie duda que lo fue, para muchos merecimos ganar, ¿qué pasa, que si en el minuto 10 nos roban ya podemos renunciar a intentar ganar el partido? ¿nos retiramos? ¿lo que hacemos los 80' siguientes ya no cuenta?
Para mí, es mucho más culpable Gilsanz que los jugadores. Una cosa es dar oportunidades a la cantera y otra es meterlos de golpe en un equipo B, cuando todos somos conscientes del nivel de nuestros suplentes, o al menos del nivel que dan con estos entrenadores de pacotilla de esta nueva era en lo que lo más valorado de los "empleados" es su servilismo. Nuestra plantilla era mediocre, pero la segunda división también lo es, y un buen entrenador le hubiese sacado algo a muchos de esos jugadores "B". Mfulu y Rama no dan para más, Patiño ahora mismo (quizás nunca) tampoco, pero el resto tenían 2 piernas y alguna habilidad. Incluso Bouldini tiene sus virtudes, pocas y sin duda muy debajo de lo que nos cuesta, pero si lo ponemos cuando jugamos a correr como locos sin meter un balón al área, pues claro, sus enormes carencias son lo único que veremos.

Dentro de lo "simple" que ha sido su labor, me quedo con sus decisiones "extrañas" de las últimas jornadas.
No entiendo que Yeremai haya jugado estas 4 jornadas desde el banquillo. Si tiene molestias lo normal es que no hubiese jugado nada, sobre todo ayer, ya con 0-3 cuando salió.
No entiendo que le haya "robado" a PabloV el honor de jugar los 42 partidos completos. Si tenía molestias, ¿para qué cojones lo mete los últimos 20'? Y si es bonito que Jaime y PabloM se hayan despedido en el campo, ¿no lo es más que PabloV, que a día de hoy es mucho mejor que los otros dos y además sigue siendo jugador nuestro, espero, hubiese completado ese "record"? 60' PabloM, 30' Jaime, y los dos tendrían su momento de reconocimiento, y PabloV su record.
No entiendo que no haya tenido bastantes más minutos Genreau para poder valorar su nivel, y en este caso no hablo solo de los últimos 4 partidos.
Y sí, claro que entiendo, pero ni comparto ni respeto lo que han hecho con PabloM. Hace un mes que podían haberlo hablado con él y no putearlo estas jornadas. Ha sido todo un caballero, al menos en público. Y ni entiendo ni comparto que en el caso de Herrera haya sucedido todo lo contrario.

Rectifico. No, no lo echaré de menos en ningún caso. Si el que viene es peor me cagaré en todo, pero no echaré de menos a ningún mediocre que la haya precedido.